domingo, 11 de enero de 2009

Edades

Valencia
en un vaso,
un despertar
no deseado
y por fin
una madre.

Ahora está aquí,
ahora y siempre.

¿Disfrutar con ella?

Imperativo
para lo más hondo.

Lo pide el pecho,
el alma,
el corazón,
mi vida.

Y yo,
en mi desastre,
procuro darle,
todo cuanto puedo.

Ayer,
otra obra maestra
en mi filmografía.

María del Carmen
en sus dieciséis,
lanzábame blancas
bolas de emoción
sin saber que a cada impacto
estremecía
cada hebra de mi alma,

mi amor por ella.

2 comentarios:

Javier Das dijo...

Qué bonito, tío, muy bonito.

Un abrazo..

Amaterasu dijo...

eres un genio!!!